“ESTRATEGIA DICTATORIAL DEL CASTRO CHAVISMO”

                          “ESTRATEGIA DICTATORIAL DEL CASTRO CHAVISMO”
                                                                                                                     Absalón Méndez Cegarra

     Circula por las redes sociales una conferencia dictada por un señor, cuyo nombre desconocemos, con acento de voz cubana, muy bien plantado, en la que expone, con firmeza y argumentos sólidos, lo que denomina: “La estrategia dictatorial del castro chavismo para mantenerse en el poder”. La disertación del conferencista, según él, se fundamenta en un análisis objetivo de la realidad, mediante el cual explica el por qué las dictaduras establecidas en Cuba, Venezuela, Nicaragua y Bolivia se mantienen en el poder, no obstante el rechazo nacional e internacional. Agrega, que, se trata de una advertencia y llamado a la opinión pública y al liderazgo político, para procurar entender desde sus entrañas lo que está sucediendo en el país y, por qué está sucediendo, a los fines de orquestar los caminos ciertos que conduzcan a los pueblos a salir de estos regímenes opresores.

     Cuatro aspectos desarrolla el expositor como fundamentales de la “estrategia de las dictaduras” para permanecer en el poder, a saber:

      1. “Resistir en el poder a como dé lugar”, sin importar qué y a quienes es conveniente destruir. Para tales fines, se construye una “oposición funcional”, a la que se encarga de legitimar todas las acciones de la dictadura. Una especie de jaula, grande o pequeña, de la cual no puede salir nadie. A la oposición auténtica se le mata, encarcela o expulsa del país. 

     2. “Desestabilización de las democracias”, en los países que se consideran amenazas para su permanencia. Todo ello ha sido definido en el Foro de Sao Paulo, cuya reunión periódica se ha celebrado recientemente en Caracas, con miras a fortalecer el régimen de Nicolás Maduro. Un hecho significativo en este punto, es, el señalamiento del expositor respecto al proceso inmigratorio venezolano, el cual considera intencional, destinado a desestabilizar la democracia de los países vecinos, causarles tal cúmulo de problemas, para que se ocupen de ellos y no se interesen por la permanencia de las dictaduras. En los análisis políticos que conocemos este punto no ha sido tratado con la claridad que lo hace el conferencista en referencia.

      3. “Politizar su situación”, para disimular que se trata de un grupo delincuencial en el poder que se inscribe en el “crimen organizado transnacional”. El expositor, señala, que, las dictaduras, como la venezolana, descansa sobre los hombros de delincuentes que se hacen pasar por políticos y dicen llamarse defensores del pueblo, revolucionarios, populistas, patriotas, nacionalistas, a los fines de evitar que caigan las “caretas” que simulan su condición de lideres políticos.

     4 “Negociar”. Negociar es la estrategia de la dictadura. Cuba lleva 60 años negociando; Venezuela, 20; Nicaragua y Bolivia, 14. Negociar es la palabra mágica que embruja a la “oposición funcional” El diálogo y la negociación permiten a la dictadura distraer, ganar tiempo y permanecer en el poder. En el caso venezolano, dice el conferencista, se han llevado a cabo decenas de procesos de diálogo sin resultado alguno. De cada uno de ellos la dictadura ha salido fortalecida y la “oposición funcional” humillada y envilecida. El pueblo, engañado, frustrado, sin esperanzas.

      Nota importante destaca el expositor para el caso venezolano. Señala al respecto, y, pensamos, que se trata de una alerta de buena fe para el Diputado Juan Guaidó, no, una crítica a su liderazgo y al papel que le ha correspondido asumir; pero, sí, a su entorno, siempre dispuesto al diálogo y a atender los llamados constantes de Nicolás Maduro a dialogar, sin dialogar. Los llamados al diálogo, los califica como “balones de oxígeno” que amerita la dictadura para seguir siéndolo y, quien, se los facilita, se convierte en cooperador, ciertamente, en “oposición funcional” que sirve, precisamente, al funcionamiento de la dictadura.

      El expositor se pregunta, con cierta picardía o malicia, cómo es posible que un Estado como Noruega, el cual no ha reconocido a Guaidó como Presidente Encargado, lo invite, ahora, a dialogar; la misma pregunta, se la hace a la dictadura, cómo invitar a alguien a quien no se reconoce. Nadie invita a un enemigo a su casa. Y, sí, lo invita, es porque le atribuye alguna cualidad, al menos, la de enemigo político, todo lo cual puede ser la explicación para que el TSJ, haya acordado la nulidad absoluta del Decreto de la Asamblea Nacional que aprobó la reincorporación de Venezuela al TIAR. Significa que, el TSJ, sí, reconoce la existencia de la AN, sus decisiones son legales, por tanto, susceptibles de ser atacadas jurisdiccionalmente. Un punto a favor de la AN.